Las preocupaciones sobre el cambio climático indican el aumento de las sequías, las olas de calor y los huracanes, que se agrava a medida que pasan las décadas. El efecto sobre las poblaciones de insectos es importante ya que la climatología afecta de forma directa a las plagas de insectos y roedores.
¿Cómo afecta el clima a los insectos?
El aumento de las temperaturas suelen tener un efecto adverso en los insectos, aunque algunos prosperan con temperaturas más cálidas. Ambas reacciones son un problema para las personas y el medio ambiente.
Según un artículo publicado en la revista Science, el aumento de las temperaturas debido al calentamiento global incrementará las poblaciones de insectos como los pulgones y las plagas del maíz en las regiones de cultivo. El aumento de las poblaciones de estas plagas afectará negativamente a cultivos clave como el maíz, el trigo y el arroz. El estudio prevé que un aumento de la temperatura de 2º en todo el mundo podría provocar una disminución del 31% en el rendimiento del maíz, del 19% en el del arroz y del 46% en el del trigo.
Las poblaciones de estos insectos crecen porque las temperaturas más cálidas aumentan el metabolismo de los insectos. Esto, a su vez, aumenta su apetito y sus tasas de reproducción. Un mayor número de insectos comedores de cultivos significa más daños en las cosechas. En entornos urbanos ocurrirá prácticamente lo mismo, el aumento del metabolismo implicará el crecimiento de las plagas de insectos, formando plagas más frecuentemente.
Efectos de la temperatura en los insectos
Aunque las temperaturas más cálidas suponen una mayor población de algunos insectos, también desajustan los ciclos y disminuyen la población de otros. Los pulgones pueden emerger un mes antes, mientras que los huevos de los pájaros que se alimentan de ellos eclosionan más tarde. Sin el número habitual de depredadores, los insectos pueden causar mayores daños y molestias.
Los efectos ya se están notando, por ejemplo, las poblaciones de mariposas han disminuido debido al calentamiento global. Las mariposas son uno de los insectos que polinizan las plantas, por lo que una disminución de su población afecta negativamente a los cultivos, lo que se agrava si aumentan los insectos que se alimentan de ellos.
Debido al incremento de plagas de insectos, mil millones de personas podrían estar expuestas a enfermedades transmitidas por insectos, como la enfermedad de Lyme, debido al cambio climático.
¿Qué implica un invierno suave para las plagas?
Aunque varía según el tipo de insecto, un invierno no muy frío implica el aumento de los insectos llegada la primavera. Algunas especies, como los mosquitos, eclosionarán antes debido a un invierno suave. Otras especies que morirían parcialmente en un invierno frío, habrán sobrevivido cuando empiece la primavera. Todas estas variables significan que el control preventivo de plagas es más importante que nunca.
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